Y simplemente no corro hacia ti.
¿Por qué te espero?
Y reprimo todos mis instintos.
¿Por qué te espero?
Y me mantengo en infinita paz.
¿Por qué te espero?
Y lo hago con naturalidad.
¿Por qué te espero?
Y mi corazón late a mil.
¿Por qué te espero?
Y actúo como un extraño.
¿Por qué te espero?
Y resisto tus miedos y dudas.
¿Por qué te espero?
Porque siento eres el camino?
¿Por qué te espero?
Será la esperanza del tan ansiado equilibrio?
No tengo respuestas,
pero te espero,
calmo y entusiasta.
Hombre y padre,
amigo y amante.
niidea quien sos pero me encanto, lo escribiste vos?
ResponderEliminarGracias por visitarme Valeria, efectivamente lo escribí en algún momento de inspiración que en ocasiones se me caen encima.
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