Divagaciones sobre mi estadía en la Tierra

Ya estando más cercano a los diez lustros que a las cuatro décadas, me encuentro repasando con plácida tranquilidad lo que ha sido mi paso por esta tierra y creo que hay cosas importantes que decir (antes que mi garganta se ahogue) y palabras que dirigir a quienes me han acompañado, de una u otra forma, durante este viaje que no ha sido exento de espinas, de alegrías, de grandes dolores, de triunfos y derrotas.

Primero a ti mi primera compañera, que me diste mis tres maravillosos hijos y quince años de altos y bajos, pero inolvidables de cualquier forma. Es cierto, sabíamos que no terminaríamos juntos, pero los lazos sanguíneos se encargarán de que permanentemente nos encontremos y riamos como siempre lo hicimos.

Tu, mi gran amor, mi gran pasión, mi nerudiana hormiguita, que me hiciste conocer ángulos insospechados de la vida (oscuros y claros), que quedaron sin duda marcados a fuego en mi y que tardarán años en desaparecer, si es que algún día logran dejarme. Sigo pensando que Benedetti se equivocó, porque nuestra perdición fue lograr al fin que me necesitaras. Tu paso por mi vida será indeleble, quizás merecimos más, pero pasión y locura no lograron dar con la cordura.

A ti, mi primogénito, el más idéntico que puede haber a un padre. El que me ha hecho reír a gritos,pero también sufrir tremendamente. Al que en el momento menos esperado tuve que poner toda mi fuerza y más que eso, para poder rescatar. Lo logramos, entre los tres lo logramos, y hoy estamos viviendo la más hermosa de nuestras etapas. Nunca dejes de soñar y ser trasparente como lo has sido hasta hoy, tus logros serán única y exclusivamente proporcionales a tu esfuerzo, el cielo es el límite.

A ti mi hija regalona, distante y crítica (ácida como su madre, certera y observadora como su padre), la única capaz de darse cuenta que la chaqueta era distinta, pero los zapatos los mismos. A ti que sutilmente y sin darme cuenta has estado pegada a mi siempre. Práctica como nadie, esforzada y luchadora. Sin duda lograrás lo que quieres, porque tu lo has decidido y así será, para ti no puede ser de otra forma. Quiero seguir siempre escuchando tu vocecita en mi conciencia.

Tu, enano, mago de los más poderosos y temidos, tu vigor, bondad y tesón te caracterizarán durante toda tu vida. No dejes que tus ojos te pongan límites, tu espíritu te dará la fuerza y sabiduría necesaria para encontrar tu manera de volar y la sombra que tenderás marcará a muchos y será guía por siempre.

Mis amigos, los antiguos y los nuevos, se merecen estar aquí en esta letanía, no son muchos, pero importantes... Gordo querido, que par de tanos más parecidos, cómplices eternos, quién diría que no somos hermanos..... Pato flaco, que aún no entiende que un sobre de jugo no se disuelve en un tambor de 200 litros..cerebral directo, certero y honesto (Alita tu también vas en esta). De los nuevos... Cass, simplemente certera, dura y directa, mujer y madre por sobre todas las cosas. Me enseñaste otros caminos para llenar una vida y que podemos entregar lo que queremos utilizando distintos instrumentos. Paula, mina, con tus constantes altos y bajos, gran oreja, demandadora de consejos, certera, sincera, directa.

El final para ti, "niño", sin intromisiones y con eterno respeto, pero con palabras firmes y directas, como han sido nuestras eternas conversaciones desde niños, desde que te tenía que echar de mi pieza para dormir e ir a trabajar al día siguiente. Ciertamente el hermano más cercano que alguien pudo tener.

A ti la que vendrás, te espero con serenidad y con la tranquilidad de haber vivido, gozado, llorado y reído cada minuto de mi vida anterior.... Ahora construyamos la nueva, la definitiva, la final.

Para mis padres habrá un capítulo especial.

Para todos ustedes, y también los omitidos mis mayores GRACIAS TOTALES